jueves, 21 de junio de 2012

Un uso interiorizado


Los niños tienen  acceso al móvil desde muy pequeños, los móviles se adquieren a los trece años como señala un interesante artículo de Francesc Bracero en La Vanguardia: .
Queremos destacar dos párrafos;

“A pesar de la crisis, España es el país con mayor penetración de dispositivos móviles en los últimos dos años. En estos momentos existen en el mercado ocho modelos de tabletas destinadas al público infantil. El 97% las usa para jugar y el 57% utiliza aplicaciones educativas.

Otro dato relevante es que el 64% de los menores utiliza aplicaciones de redes sociales en los móviles. Las más utilizadas son Twitter (27%), Tuenti (23%) y Facebook (21%). También resulta digno de analizar que el teléfono que prefieren es uno que empieza a perder cuota entre los adultos: la BlackBerry y su mensajería gratuita.”

Con estos datos queda claro que el control paterno ya no puede ser presencial  ( delante del ordenador con el niño) Internet se mueve con el niño las 24 horas de día, una parte de la solución a la nueva situación pasa por que los niños lleven incorporada a su formación tecnología una formación de usos que tendría que empezar a darse en las escuelas de forma sistemática y otra que los padres tengan capacidad para entender el medio, dar consejos, aclarar dudas y acompañar en la navegación. Hay que interiorizar los usos y estar preparados para las novedades de la industria que evoluciona de una forma rapidísima.




lunes, 4 de junio de 2012

El móvil, relación ininterrumpida


El móvil, relación ininterrumpida
smartphones
La telefonía móvil, con la aparición de los smartphones, es actualmente una de las industrias que vive una mayor revolución tecnológica y social que conlleva a una nueva forma de usar el teléfono y todos sus servicios. Uno de los cambios que se han producido es que Internet ha pasado de los ordenadores a los móviles, por lo que ahora ya no te conectas, simplemente estás conectado: llamadas, sms, whatsapp´s, envío de material multimedia, notificaciones de Facebook o Twitter son la actividad habitual entre los adolescentes. Según el estudio de INTECO (www.inteco.es) sobre hábitos seguros en el uso de smartphones por los niños y adolescentes españoles, el acceso a redes sociales, juegos y mensajería instantánea ha aumentado de forma considerable (acceso a redes sociales 54,3% en 2011 frente a 7,1% en 2010; juegos 65% frente a 51,6%; mensajería instantánea 48,3% frente a 12,4%). Estos datos evidencian el cambio de relación de niños y adolescentes con el medio. Los padres ya no pueden racionalizar las horas delante de las principales pantallas (tv’s, ordenador, smartphones y tablets), sino que deben educar a los menores para que sean capaces de saber cuándo desconectar y dedicar las horas pertinentes de estudio, juego y reuniones familiares sin estar “enganchados” constantemente al móvil.
Actualmente los dispositivos móviles están prohibidos casi de forma generalizada en las escuelas, porque siguen siendo vistos como una distracción y se relacionan con el ocio y no con la utilidad. The Age publica la historia de un colegio femenino en Australia en el que han apostado por permitir que las estudiantes utilicen sus propios dispositivos móviles en clase. De acuerdo con la directora del colegio, “uno de los objetivos del BYOD (bring your own dispositive) es ayudar a las chicas a ser ciudadanos digitales responsables, permitiéndoles que utilicen la tecnología de una forma positiva y ética”. (Vía BBVA Innovation center)
La pregunta es ¿clases sin móvil? o, debemos educar a los chic@s para que sean ciudadanos responsables y que sepan cómo y cuándo utilizar los diferentes dispositivos? y no sólo en las escuelas, sino también en momentos de ocio “offline” ¿Hay que buscar espacios de tiempo desconectados o hemos entrado en una etapa de conexión permanente?